Cómo cuidar y optimizar el uso de mi Rotavapor® Büchi – Parte II

Recomendaciones y consejos prácticos para el cuidado y optimización

El cuidado de la bomba de vacío, es fundamental para el óptimo funcionamiento del Rotavapor®, si no se logra la presión programada (vacío), no será posible el paso de líquido a vapor (punto de ebullición) de la muestra con la temperatura del baño de calentamiento programada.

  Un frecuente mantenimiento de la bomba es ideal, esto puede ser semanal y bastará con desconectar el silenciador de la parte posterior de la bomba, desconectar la manguera a la entrada de la succión o vacío e inyectar pequeños volúmenes de etanol con un frasco lavador, estando la bomba encendida, ubicar un beaker vacío para colectar los residuos a la salida de la bomba. 

Este procedimiento se debe realizar repetidas veces hasta lograr pasar unos 300 mL de etanol.  También es posible el uso de alcohol isopropílico, acetona cuando se trate de eliminar suciedad por compuestos orgánicos, cuando se trate de residuos de sales, se recomienda el uso de agua destilada.  Finalmente, para probar que el lavado fue adecuado y suficiente se realiza una medida del vacío absoluto de la bomba programando una presión de unos 20 mbar +/- 5 mbar, si se logra ese valor con la tolerancia descrita, la bomba se encuentra limpia y en condiciones de uso.

Es importante estar atentos a posibles fugas en las conexiones de la bomba de vacío, en los sellos y las mangueras, generalmente estos elementos pueden sufrir desgaste ocasionado por el uso de los mismos solventes, la temperatura, las radiaciones, la manipulación inadecuada, etc, entonces será muy importante una inspección regular de los mismos y en caso de detectar daños o deterioro realizar su respectivo reemplazo.  Si la bomba ya fue sometida a una limpieza y no se logra alcanzar el vacío absoluto, se recomienda verificar este punto de las conexiones, sellos y mangueras.

Para evitar daños en las membranas, válvulas y otros elementos de la bomba de vacío es muy importante remitirse al manual de uso, allí están consignadas las recomendaciones de uso de la bomba, así como las sustancias que no están permitidas y que pueden deteriorar y acortar la vida útil de la bomba. 

Con relación al cuidado del baño de calentamiento, como se mencionó antes, el uso de agua potable es posible, pero teniendo presente su constante recambio y un adecuado secado del baño luego de su uso y puesta fuera de servicio.

Sin embargo, en algunas ocasiones dependiendo de la calidad del agua potable, pueden formarse depósitos de minerales en la superficie metálica del baño, se recomienda no usar elementos abrasivos para remover estos depósitos, se puede utilizar una solución de ácido acético con la cual se llena el baño de manera que cubra totalmente los depósitos y se deja actuar por espacio de varias horas ubicando el baño dentro de una cabina de extracción de humos o vapores para evitar cualquier accidente y olores molestos.  Una vez ha transcurrido el tiempo suficiente se retira la solución de ácido acético y se procede a lavar el interior del baño con agua previamente caliente a unos 50 ° C y con la ayuda de una esponja suave se procede con una limpieza de la superficie del baño.

Otro punto muy importante en el cuidado del Rotavapor®, es el cuidado y mantenimiento de la vidriería.  En primera instancia, lo que debe realizarse de manera regular, es una inspección del estado físico de la misma, atendiendo principalmente a ubicar defectos como:  Grietas, fisuras, desperfectos, fracturas, residuos de muestra adheridos a la superficie de la misma, piezas atoradas como la llave de alivio de presión ó el ducto de vapor atascado.  En caso de encontrar cualquiera de las anteriores situaciones, se recomienda según el caso el reemplazo de la vidriería o un adecuado mantenimiento o limpieza para resolver el inconveniente. 

Si se presenta suciedad en la vidriería, recomendamos realizar un lavado del equipo empleando como solvente etanol, este puede ser dispensado dentro del balón para la muestra, a continuación situar el cuerpo del condensador en ángulo de 45 grados de manera que el solvente condensado retorne nuevamente al balón de evaporación y dejar trabajando el equipo como si se tratara de una prueba de rutina con las condiciones de presión y temperatura requeridas para el etanol por espacio de 1 hora o más tiempo dependiendo si hay remoción completa de la suciedad. 

En caso de requerir otro solvente dada la naturaleza química de los contaminantes, es posible hacerlo, solo recuerde consultar la tabla en el manual de la bomba de vacío para programar la presión adecuada y verificar el uso permitido del solvente a emplear.

Cuando detecte fallas físicas como fracturas o fisuras y considere que puede haber con el uso daños mayores en la vidriería y que pongan en riesgo la integridad física del usuario del equipo, recomendamos reemplazar por uno nuevo esos elementos deteriorado, en mal estado  o dañados.

Para evitar que algunas partes del equipo que se ubican y retiran con pinzas y que tienen partes esmeriladas para garantizar el sello, se recomienda limpiar con regularidad esas partes, en el caso de la llave de alivio de presión generalmente se recomienda su lubricación constante con la grasa de laboratorio especial para vacío que suministra el fabricante Büchi (es de aclarar que en algunos casos esto no será posible si su proceso se ve afectado por la contaminación que pueda causar dicha grasa de laboratorio como puede ser el caso de la síntesis de compuestos). 

Si llegara a pegarse la llave de alivio de presión, recomendamos no tratar de girarla porque puede romperse y quedarse definitivamente dentro del cuerpo del condensador de vidrio, lo que puede hacer es tomar silicona en spray y aplicarla por los bordes de la llave tratando que ingrese al interior de las paredes del vidrio, dejar actuar y posteriormente ver si es posible su extracción manual, en caso tal que no sea posible, adicionalmente puede calentar la llave con un secador de cabello a una temperatura no superior a los 80° C para lograr mayor penetración de la silicona y la expansión térmica del vidrio y así poder extraerla sin causar algún daño; finalmente si no es posible remover la llave, recomendamos contactar nuestros profesionales de servicio técnico para ésta labor.

Si el ducto de vapor no se puede sacar del cuerpo del Rotavapor® con ayuda del combi clip, puede ser posible que se encuentren residuos sólidos adheridos a la superficie del vidrio y estén presionando contra las paredes metálicas dentro del rotor, si este es el caso, intente lavar el equipo como se indicó anteriormente y trate de sacarlo después del lavado con el combi clip.  En caso que continué atorado el ducto de vapor    recomendamos contactar nuestros profesionales de servicio técnico para ésta labor.

Como último punto, vale recordar que lo mejor siempre son las acciones  preventivas, realizar los mantenimientos preventivos con regularidad, tanto de usuario como los contratados al proveedor del equipo son la clave esencial para prolongar la vida útil de sus equipos, garantizar un óptimo funcionamiento y evitar fallas prevenibles que afectan la productividad y pueden en algunos casos poner en riesgo la integridad física de los usuarios.

Juan Diego Castaño Vallejo

Químico de Soporte Técnico